Dos conciertos, un solo fin
Si por estas fechas visitan el Centro Universitario de las Artes (CUDA), es posible respirar un ambiente de concentración artística constante. Durante los cierres de semestre, ese ambiente se intensifica entre el alumnado y la planta docente pues se preparan para cerrar un ciclo lleno de aprendizaje. El lobby del CUDA es, desde hace tiempo, el lugar ideal para que la comunidad juarense sea testigo del talento de los universitarios que han hecho de las expresiones artísticas musicales su camino y meta profesional. Para muestra de ello, dos ejemplos recientes: el concierto de solistas de la Clase de Orquesta de la UACJ, coordinado por el maestro Guillermo Quezada, y el recital de fin de semestre de los alumnos de canto, a cargo del maestro Mario Tarín Acosta. Ambos docentes, de la Licenciatura en Música, trabajaron a profundidad con los jóvenes, perfeccionan y pulen el talento que observaron, día a día, florecer en las aulas.
Con talento orquestal
Ramón Ávila, Miguel Salvador, Ángel Contreras, Yaira Carreón y Brandon Martínez fueron, de agosto a diciembre, alumnos del maestro Quezada. Ejecutantes de viola, violín, cello y contrabajo, ofrecieron un recital que abarcó piezas de Rolla, Haydn, Bach, Dragonetti, Accolay y Koussevitsky. Todos ellos se hicieron acompañar del profesor titular de la materia, de la maestra Claudia Luna y el maestro Momchil Gazdov, así como de los alumnos Katia Jiménez, Ana Arredondo, Óscar Ramos, Nubia González y Adriana Solís. Todos y al unísono, llenaron de música orquestal los pasillos del CUDA y pusieron de manifiesto los conocimientos adquiridos todo este tiempo.
Al respecto, el maestro Quezada comentó: “Esta ocasión fueron puras cuerdas, dándoles oportunidad para que presentaran un solo. Nos acompañaron dos maestros: la maestra Luna al piano y el maestro Gazdov en el cello. Siempre tenemos que empujar a los muchachos para que suban de nivel, para que continúen su educación de posgrado y toquen profesionalmente. Los preparamos para que salgan y trabajen donde ellos quieran y pongan en alto el nombre de la carrera y de la universidad, es un reto para todos nosotros, sus profesores”.
Sus voces, el instrumento perfecto
Días después y bajo el mismo ambiente de concentración, cinco alumnos del maestro Mario Tarín Acosta, presentaron su recital de fin de semestre, demostrando conocimiento y maestría con el instrumento que mejor ejecutan: sus voces. Yaxkin Ramírez, Itzel Mendoza, Julio Machado, David de la O y Miguel Romero, fueron los jóvenes que tomaron e hicieron suyo el espacio universitario de las artes. Arias de importantes obras como La Flauta Mágica, Fausto y Cantata del Café, resonaron cálidamente por todas las paredes con la ayuda al piano del maestro Jorge Vargas. Al centro y frente a un nutrido público, los alumnos del maestro Tarín fueron reconocidos con aplausos por esas habilidades que cada vez mejoran y seguramente los llevarán muy lejos.
El maestro Tarín, satisfecho con el trabajo de sus pupilos, dijo: “El concierto fue el recital final, es requisito de fin de semestre. Interpretaron piezas en distintos idiomas como francés, inglés, alemán, italiano y español. Varios de ellos están por graduar, con voces muy prometedoras, continúan con su preparación. Otros son de niveles principiantes e intermedio. Es muy importante mantener estos valores de cultura y difusión de las artes, creo firmemente en la preservación del canto clásico, de métodos de determinadas escuelas y maestros. Hay libertad de abordar diversos géneros pero el enfoque aquí en nuestra carrera es lo clásico”.
Ambos docentes concluyeron que la presencia del público en los recitales empuja a los alumnos a prepararse más y mejor, ayudándoles a sentirse seguros a la hora de interpretar piezas vocales o ejecutar obras de importantes autores. Invitaron a la comunidad juarense a presenciar del talento de los universitarios que, con gran esfuerzo, se preparan para ser los mejores.
