Con el propósito de recordar al entrenador, familiar, amigo y compañero, la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ) realizó este 9 de septiembre el Torneo de Tiro con Arco Miguel Alejandro Ávila de la Vega, evento que fue homenaje al impulsor del deporte de precisión en la frontera.
Teniendo como sede las instalaciones del Complejo Deportivo Universitario de la UACJ, este certamen contempló la participación de 33 tiradores procedentes de instituciones educativas de la entidad y clubes de la localidad, tales como la UACJ, UACH, SAETA, SG Archery, MIKA Archery Club, EEDITA y Ávila Archery Club.
Compitieron una serie de deportistas jóvenes con una buena proyección en esta disciplina, entre los que destacó la orgullosamente alumna de esta casa de estudios, Ashley Berenice Salas Santacruz, quien logró la medalla de oro en la Universiada Nacional UACJ 2022.
La presea de plata la obtuvo en la ronda olímpica individual el estudiante de la UACJ Miguel Holguín, dentro de la categoría compuesto mixto.
Durante el torneo, la doctora Flor Rocío Ramírez Martínez, directora general de Extensión y Servicios Estudiantiles, acompañada por el maestro Víctor Hugo Padilla Alvarado, subdirector de Actividades Deportivas y Recreativas, así como los instructores de tiro con arco en la UACJ, UACH y ULSA campus Chihuahua, ofrecieron un espacio para hacer una remembranza al entrenador Miguel Alejandro Ávila de la Vega, quien por más de 25 años ofreció servicio a esta comunidad a través del fomento a este deporte.
Asimismo, las autoridades universitarias le hicieron la entrega de un reconocimiento póstumo a la esposa María del Carmen de Ávila, e hijo, Alejandro Ávila, del fallecido entrenador del representativo estudiantil.
“Para nosotros es un orgullo que reconozcan así a mi papá, su trayectoria fue muy grande en la Universidad, y para mi familia es más significativo que se haga en el marco del 50 aniversario de la UACJ”, expresó Alejandro entre lágrimas y melancolía.
Por su parte, María del Carmen, remarcó que “si él (entrenador) hubiese atestiguado este evento, le provocaría una gran alegría”.
Sin embargo, Ávila insistió en que no se puede igualar el legado que dejó su padre, ya que “será difícil llegar a sus zapatos”.