El arte se convierte en un puente hacia la esperanza y la construcción de comunidades más fuertes.
Con esta convicción, la Dirección General de Bienestar Universitario (DGBU), respaldada por la Subdirección de Comunidad de Bienestar y la Sociedad de Alumnos de Psicología del Instituto de Ciencias Sociales y Administración (ICSA) de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ), emprendió este 25 de septiembre la creación de un mural en la Estancia infantil del instituto, como parte de la 2ª Jornada Nacional de Tequios y Murales por la Paz y Contra las Adicciones.
El proyecto, enmarcado dentro de la campaña nacional, según la maestra Blanca Guadalupe de la Torre Cadena, jefa de función de la Subdirección de Comunidad de Bienestar, busca “intervenir en espacios públicos, mediante la creación de murales para recuperar entornos, fortalecer el tejido social y fomentar el sentido de pertenencia en los jóvenes, contribuyendo a la construcción de paz y la prevención de adicciones”.
Además del mural en el ICSA, se desarrollará otro frente a la explanada del edificio B en el Campus Nuevo Casas Grandes (CNCG) y uno más enseguida de la cafetería en el Campus Cuauhtémoc (CC); todos dirigidos por estudiantes de la Sociedad de Alumnos de Psicología, la comunidad de Bienestar en Acción y de esta casa de estudios.
“Este mural, en especial, es para fomentar la pertenencia a la Universidad, tanto de nuestros compañeros como de los niños, también, para que formen parte de este movimiento”, comentó Paola García, estudiante del Programa de la Licenciatura en Psicología y presidenta de la Sociedad de Alumnos de Psicología.
Asimismo, la estudiante Paola añadió que la Sociedad de Alumnos de Psicología planea seguir incentivando la participación de más personas para pintar otros espacios del ICSA.
La estancia infantil de este campus norte fue elegida sede de la intervención artística por su carácter simbólico: un lugar donde niñas y niños conviven en un ambiente de cuidado y aprendizaje, y donde el mensaje de transformación social cobra mayor fuerza.
De esta manera, la comunidad universitaria demuestra que el arte no solo embellece, sino que es una herramienta poderosa que transforma, educa, previene y une.