Ciudad Juárez, una tierra de contrastes y resiliencia, ha visto nacer historias de lucha y éxito que trascienden sus calles polvorientas. Esta tarde, en el Edificio X del Instituto de Ciencias Sociales y Administración de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (ICSA-UACJ), una de esas historias cobró vida en la voz del Lic. César Durán, un empresario binacional que ha convertido su pasión en una plataforma para inspirar a otros.
Con la calidez de quien ha recorrido un largo camino, Durán compartió con los estudiantes cómo, a los 12 años, encendió una computadora y descubrió el programa Corel Draw 12. Ese clic no solo encendió la pantalla, sino también su creatividad.
“El diseño, el color, las formas… me atraparon”, relató. Fue así como venció el miedo a la tecnología y encontró una herramienta para comunicarse con el mundo.
Pero la vida de un emprendedor no está hecha solo de momentos iluminados. También hay tropiezos, puertas cerradas y silencios. Con una honestidad desarmante, Durán habló de los fracasos que lo han formado y de cómo esos momentos difíciles pueden convertirse en herramientas para el futuro. “Las cosas por más difíciles que sean, al final del día son temporales. Las cosas pasan”, dijo con convicción.
Uno de los momentos más emotivos de la charla llegó cuando recordó la visita del papa Francisco a Ciudad Juárez (2016). “No tienes que ser muy religioso para entender los mensajes que pueden ayudarte en la vida”, expresó. Sus palabras tocaron fibras sensibles. Entre el público hubo risas, piel erizada y hasta lágrimas.
Durán, hoy un especialista en la creación de exhibidores de calidad mundial, ha llevado su empresa, Exhibit Chihuahua, a los primeros lugares del sector. Pero más allá del éxito empresarial, su verdadera pasión es inspirar.
“Juárez me inspira… visto desde sus jóvenes, desde sus estudiantes, que son el futuro”.
Y es que, el verdadero legado de un emprendedor no se mide solo en logros, sino en las semillas que deja en el camino. Esta tarde, en el Edificio X, más de uno salió con una nueva perspectiva, con la certeza de que, sin importar cuán complejo parezca el presente, siempre hay una historia por escribir.
