Sumamente emocionadas y acompañadas de sus seres queridos, 46 nuevas trabajadoras sociales se dieron cita en el teatro Gracia Pasquel del Centro Cultural Universitario (CCU) para rendir protesta ante la comunidad, con el fin de refrendar sus principios éticos y poner en alto la profesión a las cuales ellas se sumarán en beneficio de la sociedad.
Antes de comenzar la ceremonia, la maestra María Adriana Osio Martínez, Coordinadora de la Licenciatura en Trabajo Social, dijo a los medios universitarios: “Somos pioneros en la toma de protesta, inicia como parte del proceso de titulación intracurricular y nos permite tener una ceremonia como programa, con los padres de familia como testigos, previo a la de titulación, que se llevará a cabo a finales de este mes”. La maestra Osio señaló que la realidad y las problemáticas sociales que enfrentarán las nuevas profesionistas, en su ejercicio, serán difíciles, de corte ético. “Los testigos de honor somos nosotros como autoridades y afuera será la sociedad, y es un punto muy importante que nos enfatizan los organismos acreditadores. Respondemos a estos valores a partir del modelo educativo, pero también en el ejercicio de la ética y de las prácticas escolares”, agregó la también trabajadora social, que lleva 38 años en la profesión.
El presídium lo encabezó el doctor Servando Pineda Jaimes, jefe del Departamento de Ciencias Sociales; la maestra Osio Martínez como coordinadora de la Licenciatura en Trabajo Social; la maestra Brisa Trejo, coordinadora de Enlace en Ciudad Universitaria y las maestras Cinthia Rivera y Pilar Castillo, madrinas de generación tanto de las alumnas del ICSA y de CU, respectivamente. Luego de las palabras ofrecidas por el doctor Pineda y la maestra Osio, las alumnas Alejandra Vargas y Julissa Cabello dirigieron un mensaje a todos los presentes, en especial a sus colegas. Cabe destacar la participación de la señora Teresa Villa, madre de una de las nuevas profesionistas, quien dirigió un mensaje muy emotivo a todos los reunidos en el Gracia Pasquel.
“Nunca sean indiferentes ante el dolor humano”, les dijo el doctor Pineda Jaimes, quien luego les tomó protesta ante todos los presentes. “La vida profesional no es fácil, las enfrentará a nuevos retos y estos llegan principalmente con la actualización de la profesión, que es un deber ético. Pero en especial, para Trabajo Social, debe ser permanente y continuo. Los estudios no se concluyen con una licenciatura, hay que abrir espacios y campos profesionales, es un compromiso que ya lo hicieron desde la práctica escolar y que lo tienen que continuar en el ejercicio de la profesión”, concluyó la maestra Osio Martínez.