El Cascanueces, la obra monumental de Piotr Ilich Tchaikovsky, cobró vida durante tres noches consecutivas en el escenario del teatro “Víctor Hugo Rascón Banda” del Centro Cultural Paso del Norte (CCPN). Un gran equipo de bailarines, coreógrafas y músicos, se entregaron en cada presentación y como recompensa recibieron el reconocimiento y aplauso de la comunidad juarense. En materia dancística, correspondió a la maestra Marisol Galán Jurado ser la directora general, acompañada de la maestra Donaji Rivas Yepo en la dirección artística. En cuanto al aspecto musical, el maestro Lizandro García Alvarado dirigió, por primera vez, a la Orquesta del Cascanueces, conformada especialmente las presentaciones, que estuvo acompañado por el Coro Infantil del Centro Cívico S-Mart, dirigido por la maestra Ilse Viridiana Durón Estrada.
Familias enteras abarrotaron el CCPN en cada fecha, donde era posible respirar el espíritu navideño, propio de la temporada. La primera gran sorpresa fue observar al ejército de soldados del príncipe Cascanueces recibir a los asistentes en la antesala al Rascón Banda. Las bailarinas montaron una guardia, donde chicos y grandes aprovecharon para tomarse la foto del recuerdo. Ya en la sala era posible escuchar los ecos de las voces de los pequeños que preguntaban a sus padres a qué hora comenzaba la función.
Y mientras el público ocupada sus asientos, el equipo conformado por las maestras Galán y Rivas, ultimaban detalles tras bambalinas antes de levantar la cortina. Los más de cien participantes, ataviados con sus atuendos y disfraces, recorrían los pasillos hacia sus camerinos. Abajo, en la fosa, los músicos de la orquesta afinaban sus instrumentos acompañados del maestro García Alvarado. “La primera función siempre es la más difícil, luego te ganan los nervios”, comentaba una chica a su compañera mientas caminaban a paso veloz por el pasillo. Al escuchar la primera llamada, los ánimos entre la multitud de artistas parecieron subir de nivel y desapareció la poca tranquilidad que, apenas unos minutos antes, todavía existía.
Serena y enfocada, la maestra Donaji Rivas daba indicaciones a los chicos y chicas, para que estuvieran listos y precisaran su lugar antes de salir al escenario. Amablemente platicó para Gaceta y nos dijo: “Somos nuevas directoras y nuevos bailarines, comenzamos audiciones desde febrero para formar a todo el elenco y le pusimos todo nuestro corazón. Hubo altas y bajas pero hoy llegamos a la meta. Nos sentimos halagadas, hemos hecho el trabajo en equipo con apoyo de los directivos de la UACJ y los bailarines Elisa Ramos y Alejandro Mendoza, ambos de la Compañía Nacional de Danza. Estamos contentos, orgullosos y complacidos que se haya volteado a ver a los talleres de Bellas Artes, de donde audicionaron muchas niñas y jovencitas. Todo el talento es de la UACJ”.
Setenta y dos bailarines, cincuenta músicos de orquesta y diecisiete pequeños coristas, fueron los encargados de representar la obra que Tchaikovsky estrenó hace 127 años. Camino a la fosa, donde se encontraba la orquesta sinfónica, se observó desfilar a un grupo de pequeños y pequeñas disfrazados de ratones. Después, los soldados del Cascanueces, que caminaban un poco nerviosos y emocionados. Ya en la fosa, los músicos ocupaban sus lugares, repasaban partituras y ejecutaban cortas notas en sus instrumentos: violines, violas, cellos, trompetas, trombones, percusiones. Un poco alejado del conjunto, sentado y concentrado sobre un un gran libro de partituras realizando anotaciones, se encontraba el maestro Lizandro García, que tuvo oportunidad de platicar con la Gaceta: “Es la primera vez que me toca dirigir esta orquesta, conformada especialmente para la ocasión. Me tocó interpretarlo como violinista los últimos trece años y estoy muy agradecido por la oportunidad de dirigirlo y estar al frente de todos los músicos. Terminamos con esto un año lleno de proyectos y sueños, es un buen reto de cierre para la Orquesta pues el ballet no es sencillo, es complicado, hay planteamientos filosóficos interesantes. Lograr coordinar ballet y orquesta no es fácil, pero aquí estamos, listos. La comunicación con las maestras Marisol y Donaji fue muy buena, fue una colaboración muy bonita, se lograron sinergias. A nosotros nos corresponde cuidar a los bailarines y tenemos esa perspectiva, como músicos, en esta producción”.
La plática con el maestro García se vio interrumpida por la segunda llamada, que ponía a todos con la adrenalina a tope. Encaminados hacia la sala de teatro, la emoción de todos los artistas se resguardaba en camerinos y en silencio, donde pudimos constatar del trabajo y disciplina de sus maestras y de todos ellos. Ya en sala, los tres niveles lucían llenos, con apenas algunos asientos libres pero que no tardarían mucho en ocuparse. Con la tercera llamada se anunció también a la maestra Alpha Escobedo Vargas, directora de Difusión Cultural y Divulgación Científica, acompañada del maestro Alejandro Castillo González, subdirector de Formación y Vinculación Cultural, quienes dieron la bienvenida a todos los presentes. “A nombre del rector Camargo Nassar, les doy la bienvenida a este evento montado y producido por la UACJ. Renovamos esta producción desde los talleres de Bellas Artes, sabiendo que teníamos un semillero de 400 niñas, jóvenes y adultos, se decidió conformar por audición a la compañía que estrenamos esta noche. La orquesta, también llamada por audición: músicos de la Sinfónica Juvenil, estudiantes de la licenciatura en Música, docentes, todos ellos dirigidos por el maestro Lizandro García. Les agradecemos su asistencia y les deseamos muy bonitas fiestas, disfruten del espectáculo”, dijo la maestra Escobedo.
Segundos después, las primeras notas musicales anunciaron el inicio del primer acto. Poco a poco, bailarinas y bailarines, acompañados de los acordes que nacían de las cuerdas, maderas y metales de los músicos, dieron vida a la obra que, año con año, la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez produce durante estas fechas para que la comunidad disfrute y conviva con familia y amigos, ensalzando el espíritu de las fiestas decembrinas.
