El Museo de Arte de Ciudad Juárez fue el escenario en el que la imaginación y el poder del arte dieron lugar al recorrido titulado “Jugar para conocer, conocer para jugar”. Esta actividad es resultado del proyecto PIISO (Proyectos de Investigación con Impacto Social) de las académicas Verónica Ariza y Joana Ríos.
“El Museo como espacio cultural y de acceso al conocimiento. Estrategias de mediación y nuevas experiencias en el Museo de Arte de Ciudad Juárez” es la premisa que encabezó la realización de este proyecto.
Silvia Verónica Ariza, profesora de tiempo completo y docente investigadora del Departamento de Diseño en el Instituto de Arquitectura, Diseño y Arte, compartió que la exposición es una muestra de las actividades realizadas durante un año y medio en el museo. “Este espacio sigue siendo un centro cultural importante, y de difusión del arte”, explicó. En la Antesala se encuentran videos, imágenes y figuras como parte de la exposición.

A través de la exposición, también conocida como mediación, permite el acceso al arte. El propósito de “Jugar para conocer, conocer para jugar” es mostrar que el arte puede ser un medio para aprender, como una terapia o para expresar sentimientos. “La exposición retrata el trabajo que hicimos con un comedor infantil en la colonia La Campesina, localizado en zonas alejadas de la ciudad. Se impartieron algunos talleres y campamentos para vincular el arte y el museo”, agregó Ariza.
Por su porte, Armando Josue García Rodríguez, docente en el Departamento de Arquitectura fue el encargado de una de las actividades más particulares de este proyecto: una maqueta del Museo de Arte. “Mi participación en este proyecto tuvo que ver con el apoyo en el desarrollo, diseño y construcción de una maqueta. Se desarrolló con técnicas de impresión láser de modelado digital, corte láser, impresión 3D”.
Dicha pieza de arte fue el resultado de tres meses de arduo trabajo, en colaboración con estudiantes de la universidad. El objetivo es que este instrumento ayude a fomentar la educación en áreas como la arquitectura, en niños y jóvenes. Fuer llevada al comedor y se les mostró la estructura del edificio.
Una de las características atractivas de dicha maqueta es que los infantes pudieron diseñar su propia figura en acetato, de manera que pudiera representarse en el Museo en la maqueta. “De esta forma se incluyeron dentro de la maqueta que permitió establecer un vínculo con el edificio”, explicó García Rodríguez
“Jugar para conocer, conocer para jugar” es parte de los Proyectos de Investigación con Impacto Social, y que, en esta ocasión, se promueve la participación de la sociedad en el arte, la cultura y la historia de la ciudad.




