Dando cumplimiento al convenio pactado entre la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez y la Universidad Autónoma del Estado de México, este 1 y 2 de mayo, el doctor Javier del Ángel Caraza, profesor investigador de la Sección de Medicina Interna del Hospital Veterinario para Pequeñas Especies (HVPE) de la Facultad de Medicina y Zootecnia (FMVZ) en la UAEMéx, visitó a residentes de la Especialidad en Medicina y Cirugía en Pequeñas Especies del Instituto de Ciencias Biomédicas (ICB) de la UACJ.
Su visita, a fin de “compartir un poco de mi experiencia en el área de medicina interna, específicamente en lo que es la nefrología y urología en perros y gatos, y los procedimientos de mínima invasión”, compartió en una entrevista con este medio.
Una vida dedicada a la ciencia
A sus 20 años, el doctor Del Ángel Caraza inició su contacto con la ciencia, en la que ha logrado impartir más de 300 cursos de actualización, conferencias magistrales y ponente en múltiples foros nacionales e internacionales en países de América latina, EUA y Europa.
Además, se desempeña como autor de artículos científicos indexados, de divulgación y capítulos de libro, así como revisor invitado de las revistas científicas internacionales.
“Yo estudié medicina veterinaria y tuve la oportunidad de que cuando iba en la mitad de la carrera, en quinto semestre, abrieron el hospital-escuela en el que trabajo actualmente y para mí fue como una oportunidad de desarrollo”, relató.
Destacó que en el HVPE de la UAMéx (febrero de 1992), al que cataloga “como un nicho de oportunidad para enfrentarte a la realidad y a la cuestión clínica”, se fundó con la finalidad de cumplir con tres objetivos:
- Ser un espacio académico de enseñanza especializada en la medicina y cirugía en perros y gatos.
- La prestación de servicios médico-quirúrgicos veterinarios a la sociedad, responsable en su quehacer médico, que contribuye al bienestar y la salud de los perros y gatos, con un alto sentido de responsabilidad social.
- La generación de conocimientos al desarrollar investigación básica y clínica.
¿Cuáles considera los avances más significativos en los últimos cinco años en su campo?
“Siempre se están descubriendo nuevos procesos diagnósticos, o cuando menos están validando, y hay gente que está tendiendo a desarrollar nuevas técnicas terapéuticas y las comparten en artículos científicos, en eventos académicos, en congresos y pues tú tienes que estar analizándolo y tratar de adaptarlo a tu contexto real”, apuntó.
Añadió que algo importante que los veterinarios deben contemplar es que “deben analizar su área geográfica y medio ambiente, y ver qué enfermedades son las que están impactando en ese lugar, porque puede ser que esto cambie con respecto al área geográfica o a la región. Entonces, probablemente, la geografía y la cultura de la gente impactan en la presentación de una enfermedad y, bueno, tienes que tú analizar esas necesidades y buscar las mejores opciones”.
Como académico, ¿qué habilidades cree que son esenciales para las nuevas generaciones de veterinarios en su especialidad?
“Lo primero, formarse como médicos generales en una institución como esta, y de ahí ellos podrán decidir si quieren seguir siendo médicos generales o en algún momento desarrollar una línea de especialización”, exhortó.
Consejos para dueños de mascotas
¿Qué signos de alerta en perros o gatos deberían motivar una consulta urgente con un especialista en cirugía?
“Yo creo que las consultas no deben de ser urgencia, o sea, realmente las consultas deben de ser conscientes de que probablemente existe la probabilidad de que se presente una enfermedad que en algún momento puede ser crónico-degenerativas”, enfatizó.
Unos de esos factores pueden ser la edad de los perros y los gatos que están viviendo más tiempo. “Los perros y los gatos están envejeciendo junto con la población y eso los está haciendo que estén predispuestos a enfermedades crónico-degenerativas. Y ahí hablamos de enfermedades como enfermedad cardiaca, como tumores, como enfermedades digestivas, inflamatorias o bien enfermedades renales”, especificó.
“Un paciente, a partir de los seis años, es bueno hacer un chequeo general: pruebas de laboratorio, estudio del trazo geográfico de abdomen, y yo con eso me daré una idea del estado de salud del paciente. Y podría encontrar muchas enfermedades que por el momento no se manifiestan clínicamente muy bien, pero las puedo atender ya”, concluyó.